Por Eduardo González Lanuza

Ya desde el despuntar del siglo XX, la audacia fue la gran consigna, explícita o implícita, de las vanguardias artísticas. Desde el terreno del arte, como suele ocurrir, se extendió luego a otras áreas como la política, la moda o las costumbres, y ahora la encontramos, banalizada y corrupta, en esa ubicua transgresión de la que hablan los críticos, los locutores, y las revistas semanales.…
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